El café ya no es sólo café. Las tiendas especializadas han cambiado por completo la forma en que vemos y saboreamos nuestra taza de la mejor bebida del mundo (Sí, porque lo es). Conforme ha ido pasando el tiempo hemos descubierto varios métodos para prepararlo, y la gente se está dando cuenta de las pequeñas complejidades que afectan el sabor general de nuestra bebida. Pero, ¿cuál es realmente la diferencia entre el espresso y el café de filtro?
De esto vamos a hablarte hoy, así que… ¡Quédate y sigue leyendo para no perderte nada!
Espresso es la respuesta italiana a tus necesidades inmediatas de cafeína. Así es, es rápido de hacer y de consumir, al igual que la cafeína que te da.
Entonces, ¿qué más lo distingue? Bueno, elaborado con agua a presión a alta temperatura (¡casi hirviendo!), corriendo a través de granos de café finamente molidos, es más denso y concentrado que el café filtrado.
El espresso no solo sale más espeso y concentrado que el filtro. También tiene capas:
– Crema: Esta es la capa superior de color marrón dorado de un tiro, compuesta de proteínas, aceites y melanoidinas (que se crea mediante la combinación de azúcar y aminoácidos).
– Líquido: Esta es la porción principal del trago de espresso y aporta acidez y dulzura. Que se podría considerar también como dos partes distintas: el cuerpo y el corazón.
– Como ya sabemos, el café espresso es de origen italiano, pues son ellos los que dicen que este tipo de café tiene que tomarse en unos 30 a 40 segundos para que no pierda calidad.
Espresso y filtro son, en teoría, el mismo concepto. Los conceptos básicos : se vierte agua caliente sobre los posos de café, el agua pasa a través de los posos y un filtro de alguna forma, y cae en un recipiente.
Pero la diferencia clave entre el filtro y el espresso es que, en lugar de ser empujada por la presión, el agua corre a través del café molido únicamente por gravedad. Por esta razón, el proceso de preparación lleva un poco más de tiempo para obtener un resultado diferente, pero aun así celestial.
Conseguirás un café con mucho saber y súper intenso. Tendrá aromas únicos y exclusivos, esto es posible ya que el agua extrae aceites y sustancias solubles al café.
No hay una respuesta simple a esta pregunta.
El café de filtro es una forma más precisa de probar los diferentes matices de un café, especialmente aquellos que pueden no brillar tan bien en un espresso. El proceso en sí también es pacífico y tranquilizador. Pero no es comparable con el espresso, puesto que se elabora de manera diferente, a través de un método completamente distinto.
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